«Tenemos que pescar de manera más sostenible», dijo el consejero en el pregón.

El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta, Antonio Silván, ofreció ayer el pregón de apertura de la Semana Internacional de la Trucha en el que abogó por una pesca más sostenible.

El consejero leonés anunció que se propone que la Semana de la Trucha tenga una mayor repercusión mediática fuera de León y de Castilla y León «y se convierta en un referente nacional de la pesca de la trucha, en la fiesta grande de los pescadores de toda España y otros países».

Silván defendió que «tenemos que pescar de otra manera, de manera más sostenible», dijo en su discurso. Silván, que se definió como un pescador en «stand by», destacó sus «sensaciones y recuerdos de mis días de pesca» en los que resaltó «la sensación de paz, la concentración que exige y la abstracción de los problemas».

«Sólo hay una clave para todo ello», dijo «no extraer más allá del crecimiento, de la productividad» y defendió la pesca sin muerto. Destacó que en la actualidad existen 250 kilómetros de río en 47 cotos para la pesca sin muerte y 21 cotos mixtos con días sin muerte que suman otros 120 kilómetros.

El consejero hizo una mención expresa al trabajo desarrollado en las aulas del Río y las piscifactorías para repoblar con truchas autóctonas, «de pureza genética contrastada» y destacó las de Vegas del Condado «que deben ser potenciadas».

Silván reconoció que «la pesca tiene problemas, que las poblaciones trucheras han sufrido un importante declive respecto a las que disfrutábamos hace unas cuantas décadas» y citó como las causantes «la contaminación de nuestras aguas, la extracción, legal o ilegal, los caudales, las canalizaciones, el furtivismo, la predación.... y también, aunque decirlo no sea políticamente correcto, la sobrepesca». Reconoció también que los pueblos contaminan más que hace décadas aunque también reconoció que «cada vez se depura más, y en los últimos años, todas las administraciones hemos hecho un importantísimo esfuerzo en esta materia y, en la actualidad, en León, en Castilla y León la mayoría de la población depura ya sus aguas».